El primer paso
4 marzo 2010 by JRT
Este blog va a recoger mi actividad académica y algunos comentarios sobre política y ciencia política. Compaginar docencia académica, investigación politológica e inquietud política no resulta sencillo. Sobre todo si se asume como principio de la disciplina que la política, pura, desprovista de ropaje científico, no tiene espacio en el aula. Ni lo tiene para los estudiantes ni debería tenerlo para los profesores. «No está en las aulas el puesto del demagogo o del profeta», afirma Weber con razón. Cómo preservar este principio sin sacrificar la pasión política es una noble y delicada tarea. El resto, bienvenido sea.
Más en: Max Weber, «La ciencia como vocación», en El político y el científico, Madrid: Alianza. Trad. de Francisco Rubio Llorente.